Muchos autores nos preguntan ¿porque sólo tienen disponibles algunos tamaños de libro? Y la respuesta es: ¡por optimización de costos! Esta es la manera de ofrecer libros más económicos a nuestros autores y lectores. Les explicamos.
A lo largo de los años, la industria productora del papel y sus respectivos clientes han llegado a un acuerdo sobre algunos tamaños normalizados de papel. Estos tamaños serian fabricados de manera habitual por la industria y, con un tamaño estándar, los clientes (como nosotros, la industria gráfica) han podido establecer mejores costos y evitar desperdícios.
En la mayor parte del mundo se basan en algunos tamaños definidos bajo la norma ISO 216, que a su vez se basa en la norma DIN 476 (del año 1922). Paralelamente siguen existiendo otros sistemas tradicionales, como los utilizados en los Estados Unidos, Canadá y México, u otros que están cayendo en desuso como el tamaño folio y sus derivados, anteriormente utilizados en Europa.
La idea que subyace en la normalización de los formatos es aprovechar el papel al máximo de modo que se desperdicie lo mínimo posible.
Ejemplo de tamaño normalizado de papel
Tomemos como ejemplo la serie A, que es un formato conocido mundialmente. Nota que el pliego es formado un papel de 1189 x 841 mm (es decir, es ¡un papel de 1,189 x 0,841 metros!). El pliego entero es conocido como A0. Si dividimos este pliego en la mitad, obtenemos el tamaño A1 (594 x 841 mm). Si dividimos el A1 en la mitad (o el A0 en cuatro partes) obtenemos el tamaño A2 (420 x 594) y así suscesivamente. Nota que utilizando esta metologia tenemos algunas medidas de papel dónde no hay desperdicio.
Por lo tanto, para el mínimo desperdicio de papel, podríamos tener sólo libros en los tamaños anteriores, ¿correcto?
Es correcto, sin embargo, como no todo es perfecto en el mundo, la normalización no es única y existen también otros tipos de papel, como por ejemplo, el formato de papel americano (que es un formato ampliamente utilizando en hispanoamérica).
En el formato americano existe, por ejemplo, el tamaño carta (216 mm × 279 mm) y si lo dividimos en la mitad, obtenemos el tamaño media carta (216 mm x 140 mm). Si notan, este último tamaño es el tamaño de uno los libros que ofrecemos (14 x 21 cm).
Como trabajamos con diferentes máquinas de impresión, en diferentes países, debemos utilizar un formato que contemple a todos los países. Y es por eso que trabajamos con el formato 14 x 21 cm (que cabe adentro del tamaño A5). De esta manera si el país trabaja con el formato A5, hay un desperdicio mínimo. Al contrario habria un desperdício más grande.
Tomemos como ejemplo un autor que haya solicitado que imprimamos un libro en tamaño 11 x 25 cm. Al tomar un pliego del tamaño A0, tendríamos un desperdicio de 12% de papel, como pueden ver en la imagen abajo.
Como este papel es inutilizado, este costo es sumado al costo del libro. Es decir, si utilizaras un tamaño de papel diferente, podrías tener menos desperdício de papel y el libro quedaría más económico.
Es por eso que la primera decisión tuya, como autor, debe ser elegir el tamaño de papel en el cuál tu libro será impreso. En nuestra plataforma, trabajamos con algunos tamaños estándares y puedes calcular el precio de impresión de un libro en cualquiera de los formatos.
Existen algunos otros puntos a tener en cuenta. Si tu libro tiene sangrado, debes tener en cuenta que puede ser mejor, por ejemplo, que el libro tenga un tamaño final de 13 x 20 cm (ya que es necesario imprimir el sangrado de mínimo 0,5cm).